Cobardía...

La suya y la mía. La suya por no atreverse a probar a tener algo conmigo (más o menos serio, pero algo, nuestro), y la mía por no ser capaz de cortar las cosas de raíz. Porque de vez en cuando la balanza entre risas y lágrimas se me desnivela con él. Y lo paso mal.

Me llama para tomar café, y me dice que si mi geme vendría también... tal y como había pasado la mañana de ayer (en la que incluso María me pregunto que que me pasaba) la respuesta más rápida que se me ocurrió soltar fue "Si lo que quieres es tomar café con ella, llamala a ella directamente, como hiciste ayer"...pero controle la lengua por una vez y simplemente le dije que no tenía ni idea de si iba a querer o no. Porque entre otras cosas, él piensa (supongo) que yo no me entero de esas cosas; de que la llama a ella e intenta quedar (no sabemos...o no queremos saber para que). Y en realidad es mejor así, porque ya sabemos como son los tíos...que se enredan a pensar cosas raras, y en este caso se pensaría que mi geme no queda con él por mi o cosas así, cuando en realidad no queda con él porque simplemente no le apetece (y últimamente porque anda entretenida con "yogurin" =), como me alegro de que algo la despiste de recordar a su camarero ^.^)

9 días...buff...

En fin, supongo que cambiaran mucho las cosas en poco tiempo, o eso me gustaría.
Estuvo toda la tarde "roneandome", incluso proponiéndome que "nos escondiéramos" en un rincón. No sé porque, le dije que no, pase un poco de él (un poco, más no puedo) pero si puedo decir que lo que pasé, fue natural, no pensé en tenerlo "puteado" ni nada por el estilo, simplemente no tenía cuerpo para nada.

Nos tenemos ganas, los dos, eso si que me consta. Lo malo es que sus ganas y mis ganas no siempre concuerdan y sobretodo, no nos concuerdan la mayoría de veces las circunstancias. Pero la verdad es que lo paso genial con él, aunque sólo sea llendo en su coche, ya soy feliz...fíjate tú si soy tonta...