San Valentín

Porque la luna a veces se me esconde...y como no me ilumina, no me deja dormir.

Es tan irritante no encontrar un aliento cerca de mi labios.

Más que nunca hoy.

"Ni rosas, ni juguetes"...San Valentín es un invento de los comercios, sí. Pero yo para pasar un San Valentín de verdad, me quedo en tu pecho, que me sale mucho más barato y en el, las únicas marcas que encuentro son las de mis besos.

Que no se puede ser piscis y pasar más días como estos sola.

Coincidencias del destino o no, nunca he pasado un San Valentín en pareja. Debe de ser porque mis relaciones han sido un poco mas cálidas en cuanto al tiempo y casi nunca coincidieron con el invierno.

Y claro, ves tanto amor de golpe a tu alrededor, que una se queda como agazapada, así en una esquinita, tapándose los ojos para no mirar (y esperando absurdamente que el amor de tu vida llegue para cogerte de la mano y sacarte a bailar)...y sin ganas de nada, solamente de gritar.

De pedir auxilio para que no me aplasten sus corazones tan hinchadísimos de felicidad.

¿Celos?¿Envidia?...no...anhelo...esa palabra a la que ya he dedicado una entrada enterita, y con la que podría rellenar mil y una más.

Yo sólo quiero vivir sentimientos pasados en circunstancias mejores.

Y que se me llene el alma y me brillen los ojos sólo con verte cerquita de mi.